jueves, 1 de agosto de 2013

Peru-dos

Algunas cosillas del Peru:

- La visa es hasta 90 dias y se puede renovar con una cruzadita a algun pais vecino.
- El cambio de peso argentino varia entre 0,23 ctvs y 0,27 ctvs. de sol. El dolar 2,60 soles maso.
- Un menu cuesta 5 soles mas o menos.
- Los hostels a partir de los 10 soles.
- Desde lima a Mancora (panamericana) se gastan mas de 100 soles de peaje si tenes vehiculo liviano.
- Hay seguros argentinos que cubren hasta peru, aunque el soat es mas barato. La policia hincha con eso. 
- No dejen de visitar el Huascaran.

Hola, que tal? Habíamos dejado el relato en Hidroeléctrica, creo...

Y nos fuimos del valle sagrado sin dejar de ver sagrados valles plenos de beieza... El camino hacia a Abancay estuvo lleno de lugares vuelapelucas. 





Pasamos por Abancay sin pena ni gloria... la despedimos desde las alturas y seguimos hacia Ayacucho.
Por aquellas fechas se estaba trabajando en el camino que nosotros recorrimos; por lo que las esperas eran bien recurrentes y el trazado bien duro por tramos.
En un momento nos encontramos con un lodazal que nos dejo piantados sin saber que hacer. Cavamos? Trepamos por acá? Trepamos por allá? Trepamos? Y si pasamos a fondo? Buf! Esperamos, entonces, a que algún vehículo pasara para ver como lo hacia y así vimos como un mini bus paso sin aparente dificultad. A darle, Tita, nomas! De off road se recibió ese día, la muy humilde.




 
Llegamos a Ayacucho de noche y así la recorrimos un poco. 



Pocas veces se dejan ver las capillas fantasma. Son tímidas medio rosadas.


La plaza de Ayacucho se presta para reflexionar, boludear con el teléfono y sacar fotos amarillas.


En Ayacucho decidimos dejar de andar por la sierra y bajar hacia la costa, ya que los caminos de la sierra nos estaban retrasando mucho y castigaban bastante a Tita. Subimos desde Pisco hasta Paramonga y de ahí volvimos a subir hasta Huaraz para conocer el parque Huascaran; todo un espectáculo. Algo muy Curioso es que, si bien esta permitido dormir dentro del parque, hay que pagar un abono de 60 soles que te permite permanecer nomeacuerdo cuantas semanas; pero no hay chance de pagar solo por una noche.


El nevado Huascaran. Mas cerquita una roca que no quiso ser menos.



Laguna Llanganuco.


Marco y Flor salieron a disfrutar de tan hermosos lugares mientras yo buscaba un lugar intimo para inducirme a vomitar el maldito alimento que me postro. 


La enfermera Morcilla cuida del defenestradisimo andrajo que suele ser su padre.


Marco en su puesto de piloto suplente.


Tan linda felina no merece menos que ser feliz.


Pese a la resistencia de Marco fuimos a conocer la ciudad de Chan Chan, perteneciente a la cultura Chimu. 


A la Morsa no supo contextualizar y se hecho alto so__te en medio de las ruinas.




Y pasamos, entonces, a velocidad de rayo poco veloz, por Trujillo, Chiclayo y Piura
con el objetivo de pasar los últimos días con Marusqui en Mancora. Se nos Hizo largo y los peajes nos dejaron medios baleados, pero llegamos.

Recién llegaditos es que al pasar por un puente avistamos cierta camionetita roja... era "la gorda".
Cuando bajamos al encuentro de esta cerda nos encontramos con un grupo de viajeros bien limados, jaja.
Entre ellos Ana y Sergio, los dueños de la camioneta; a quienes solíamos seguir a través de su blog http://abrazamundos.blogspot.com/. Tras las presentaciones correspondientes, un poco de papaya y otro poco de cholulaje; con Flor y Morcilla intuimos que habíamos encontrado a dos verdaderos compas. Y es que desde esa tarde supimos, sin nesesidad de hablarlo, que el viaje volvia a pintarse de otro color; el viaje nos regalaba otra compania.
A lo largo de la ruta uno encuentra mucha gente, pero al parecer hay algunas personas con las que se siente uno enchufado inmediatamente. Desde un lugar muy humilde, muy sencillo; desde un lugar muy familiar se siente conectado uno.


Encuentro cumbre. La gorda y tita contemplan el ocaso.

Allí estacionados estaban, también, Santiago, su compañera, su perro Oliverio y una viajera colombiana que les acompañaba en su super bus, dos viajeros norteamericanos, Andres de Colombia y Mike (Inglaterra) junto a Dunia (Portugal) que en su bus Renault ya le vienen dando media vuelta al mundo.



Fotografía gentileza de Marusqui Lainas.


Paparulo, Flor, Marusqui, Mike, Aaron, Ana, Ser, Dunia. Todos en El bus.


El dream team de Mancora. De mate en mate... 
Lastima que no se aprecia el atuendo de Marco.

Si bien Ana y Ser tenían planeado seguir camino hacia punta sal y demás, decidieron, por esos días, quedarse un poco mas en Mancora. Menos mal papasfritas!!! Mira si nos separábamos allá!

Como se nos hizo costumbre con Gonzalo, otro viajero en combi, nos encontramos cruzando la ruta después de nuestro ultimo contacto en las calles de Cuzco; el nos contó a cerca de un hostel... "La casa de Yola", nos indico. "- Esta buenisimo! Y la Dueña es re piola y hay mas combis y bla y bla", dijo. Así que dormimos una noche mas en la praia y decidimos ir a ver de que se trataba ese lugar.
Plaf! Un cachetazo al corazón, era!
Yola es un golazo de media cancha para cualquier viajero.
Ella nos abrió las puertas de su lugar a los seis y nos dejo estacionar en la puerta (ya que no había mas lugar en el patio) para poder dormir tranquilos en los vehículos.



Bigotes para todos y todas.


Los profesionales preparan sus equipos.


Ferneee!!! El equipo de Yola en todo su esplendor. Fede y su bike, Los zaigua (David y su compa), Gonzalo e Ilean de Rodando por america, otro biker colombiano, Ana, La morsa y yo, Jorge, Yola, Marco, Sergio, Blanquita y Flor.

Yola nos llevo a pasear en uno de esos días hasta Ñuro, en donde las tortugas marinas. El lugar es, básicamente, un muelle de pescadores que se abarrota de fragatas, pelícanos y tortugas en busca de comida facil. Los bichos aparecen y desaparecen de repente, acosados por la gente y los pelícanos, también. Pero son amistosos y se dejan ver y tocar sin mucho complejo.


Marco y Jorge fueron de los pocos valientes que se zambulleron a nadar con los reptiles.





Tanta zabullida tuvo su recompensa... dos animales un solo corazón.






Muy lindos días pasamos en lo de Yola. Muy linda gente conocimos en lo de Yola.
Mancora fue un espacio de encuentro y de despedidas. Marquito se fue unos días antes a que partiéramos junto con los chicos (Ana y Ser) hacia el Ecuador, como decidimos en vistas de lo bien que nos llevavamos pese a que Sergio tome café instantáneo.

GRACIAS, MARUSQUI!!! GUI LOV LLU!


Gracias, Yola!!! Fue un gustazo conocerte y saber que hay gente como vos! Fue un aprendizaje, de veras.


Souvenir para Yola. Tita y La Gorda beben agua salada.

De Mancora partimos hacia Punta sal, donde nos dimos unos buenos chapusones; después tumbes y derecho hacia la frontera. Dos bólidos fueron sacudiendo el asfalto a no mas de 80 km/h hasta el limite nacional.


"Acá esta lindo para las chatas". Dije.

GRACIAS, PERU!!!